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Joaquín Sabina frente a Manuel Expósito, de Multimedia Jiennense, y Alberto Román, de Diario IDEAL.
Un Sabina menos hijo pródigo y más hijo predilecto

Un Sabina menos hijo pródigo y más hijo predilecto

El ubetense dijo que le gustaría «que acabe en Úbeda» su rica biblioteca junto a otros objetos personales y anunció que su nuevo disco saldrá en febrero de 2017, comprometiéndose a intentar presentarlo en San Lorenzo en formato acústico

R. I.

Viernes, 9 de septiembre 2016, 11:08

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Volver a Úbeda es algo que el cuerpo le pide «cada vez más» a Joaquín Sabina, quien recordó que en su día se marchó de una ciudad «bastante siniestra, de un conservadurismo roñoso y atroz», y que ahora regresa «a una Úbeda nueva, joven, democrática y abierta». Un lugar en el que, ahora sí, se siente a gusto, querido y respetado. Así lo dejó de manifiesto este jueves en una entrevista con público que le hicieron al alimón Alberto Román, periodista de IDEAL, y Manuel Expósito, director del grupo Multimedia Jiennense, quienes con sus preguntas lograron que este ubetense universal hablara sobre los más diversos temas, como sus recuerdos o sus proyectos. Asimismo desveló varios datos de su próximo disco, que anunció para febrero de 2017 con el título «Lo niego todo» y que se comprometió a intentar presentarlo en Úbeda, quizá en formato acústico, y adelantó alguna iniciativa interesante para el municipio, como que podría ser sede futura de su rica biblioteca particular y de un amplia selección de objetos que ha ido coleccionando.

Durante el acto, desarrollado en San Lorenzo dentro de las terceras jornadas 'Sabina por aquí' un día después de la tertulia poética que el cantante protagonizó junto a su buen amigo Luis García Montero, un Sabina relajado, amable y dispuesto a responder a cualquier pregunta de los dos periodistas que le acompañaron sobre el escenario, se mostró orgulloso del público que ha ido encontrando en las dos ediciones en las que ha participado de esta iniciativa organizada por el colectivo Peor para el Sol y la Fundación Huerta de San Antonio. «Las ciudades son la gente que las hace», manifestó, contento e ilusionado con este reencuentro con el lugar que le vio nacer.

De esta forma, le gustó que los informadores le dijeran que ya no se le considera tanto como el hijo pródigo y que se le empieza a sentir como el hijo predilecto. Un título que, tras ser aprobado por el pleno del Ayuntamiento junto a la concesión de la Medalla de Oro de la ciudad en su favor, se encuentra en fase de recogida de adhesiones y se oficializará en cuanto su agenda se lo permita, quizá para diciembre, aseguró. Al respecto dijo que sus aspiraciones no van orientadas a recoger medallas, y aunque aseguró que le hace una tremenda ilusión, remarcó que su premio es el cariño de sus paisanos.

Su biblioteca, un legado

Preguntado por la visita que la alcaldesa, Toni Olivares, le hizo recientemente a su casa, respondió que fue muy cordial y que es la primera vez que siente que tiene una interlocutora en el Ayuntamiento de su ciudad. Según contó, siempre quiso tener algún punto de unión con Úbeda, colaborar «para remover la vida cultural», pero desde que volvió de Londres y empezó a cantar «han pasado cuatro o cinco alcaldes» y «no encontré la más mínima empatía», algo que sí halló «inmediatamente» con Toni. «Independientemente de que fuera del PSOE o del PP, era una chica que hablaba mi lenguaje, que me entendía y yo la entendía, que no iba de política profesional».

¿Pero se puso algún proyecto sobre la mesa que ataña a Sabina y a la ciudad? Pues asumiendo que era «muy bocazas», contó que tiene una magnífica biblioteca personal, con muchas primeras ediciones y obras dedicadas por sus autores, y que su deseo es «que acaben en Úbeda». «Cuando me muera, que no va a ser nunca -dijo entre risas- no quiero ver esas joyas de libros malvendidas en el rastro; sería muy triste que se deshiciera esa biblioteca». De ello empezó a hablar hace unos meses con la alcaldesa «sin ningún tipo de compromiso». Y a los libros se añadirían otros muchos objetos personales que podrían conformar una especie de centro o museo dedicado a Sabina en su ciudad natal, pues recordó que es «coleccionista de cosas que no sirven para nada pero son muy hermosas».

Muñoz Molina y la 'chiquitilla'

Durante la charla hubo también momentos para anécdotas de corte ubetense. Siendo el día que era, la festividad de la Virgen de Guadalupe, patrona de Úbeda, contó que cuando por casualidad se encuentra con el escritor Antonio Muñoz Molina, otro ubetense universal y Premio Príncipe de Asturias de las Letras, desde lejos le grita «¡viva la Chiquitilla del Gavellar!», a lo que el paisano le responde «¡la más chica y la más grande!». «Y ya después nos vamos cada uno por su lado», añadió entre carcajadas.

Por un buen rato también se habló de su nuevo disco, en cuya preparación está actualmente inmerso y del que el día anterior adelantó en exclusiva dos canciones, una recitada y otra cantada a capela. Las letras ya están terminadas. «Un disco de tres», pues a partes «muy equilibradas» están trabajando Sabina con las letras y algunas músicas, Benjamín Prado con las letras y Leiva (ex Pereza) con las músicas, los arreglos y la producción. Como ya hiciera con '19 días y 500 noches', su trabajo más exitoso, y persiguiendo un sonido algo diferente, ha buscado un nuevo productor y no ha contado para esta misión con sus habituales Pancho Varona y Antonio García de Diego. «Éramos ya un matrimonio viejo y aburrido que no follaba», ejemplificó, aunque de cara a la gira sí espera estar acompañado de sus músicos de siempre.

Así, aseguró que ha encomendado la producción a Leiva, pues se encuentra en un buen momento, muy creativo, y cree que le dará al disco un toque más fresco. Aunque, como confesó el día anterior, su intención es «decir la verdad, que tengo 67 años y mi preocupación es envejecer». Adelantó que, en principio, el título será 'Lo niego todo' y que espera que salga a finales de febrero de 2017. Respecto a la gira, habló de conciertos en grandes recintos, con su banda y toda la parafernalia, pero matizó que le haría especial ilusión poder presentarlo en formato acústico en San Lorenzo, con unos cuantos músicos y el propio Leiva. Se comprometió públicamente a intentarlo, lo cual generó una sonora ovación.

«Que me lleven al sur donde nací»

Joaquín Sabina dijo que le hacen «mucha gracia» comentarios del tipo «nunca ha querido a su tierra», «siempre ha renegado de Úbeda» o «no viene por aquí». Y aseguró que siempre ha sentido añoranza de su ciudad, aunque tuviera que marcharse por diferentes circunstancias. Es más, confesó que en más de una ocasión, con amigos y de madrugada, ha paseado por sus calles y plazas. También comentó que en muchas de sus canciones hay referencias a Úbeda, a su infancia y juventud, pero «hay que saber buscarlas» porque están de una forma velada. En la recta final, le propusieron que el Sabina actual terminara algunas frases de canciones suyas de otros tiempos, actualizándolas a su forma de pensar de hoy. Una de ellas fue «cuando la muerte venga a visitarme», a lo que respondió el verso original: «que me lleven al sur donde nací».

Visitas

Durante la mañana de ayer jueves Sabina también tuvo la oportunidad de visitar la exposición 'Garagatos' que se encuentra en el Antiguo Hospital de los Honrados Viejos del Salvador y que incluye sus propios dibujos publicados en el libro del mismo nombre. Asimismo pasó por la calle Mesones para contemplar el mural que le ha dedicado el linarense Miguel Ángel Belinchón 'Belin', uno de los muralistas más prestigiosos del mundo, a quien tuvo la oportunidad de saludar y felicitar personalmente, agradeciéndole su trabajo.

Enlace para ver el vídeo de la entrevista grabado por DiezTV: https://www.youtube.com/watch?v=cExDc4dCSSE

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