El alcalde espera que el retraso del campo de fútbol no tenga que ver con las elecciones
El alcalde de Úbeda, José Robles, lamentó que el domingo no se pudiera utilizar el campo de fútbol San Miguel y aclaró algunas cuestiones al respecto, mostrando su indignación con la actitud y las declaraciones del portavoz del PSOE, Marcelino Sánchez. «Lo único que hemos hecho ha sido intentar resolver el problema y solicitar el uso del campo», declaró el primer edil, quien recordó que se remitió un escrito a la Junta asegurando que el Ayuntamiento se responsabilizaría de lo que pudiera ocurrir con las coberturas legales correspondientes.
Alberto Román Vílchez
Miércoles, 11 de mayo 2016, 13:25
Pero no hubo respuesta, con lo cual la carta se volvió a enviar el pasado viernes. Y ante un nuevo silencio se decidió recurrir al ... teléfono, lográndose hablar con el subdirector general de Deportes. Éste explicó por fin la realidad de la situación «que se nos había ocultado». Y es que, la empresa responsable de las obras que se están desarrollando en el terreno de juego no autorizaba el uso, con lo cual la Junta tampoco podía hacerlo y el Ayuntamiento mucho menos.
«Ni los suyos le escuchan»
Así, Robles dijo no entender que el portavoz del PSOE dijera unos días antes que todo estaba resuelto gracias a su grupo y que le acusara de intentar atribuirse unas gestiones realizadas satisfactoriamente por los socialistas. «Si todas las gestiones que han hecho por la ciudad han sido así, no me extraña que estén las cosas como están», afirmó el alcalde, asegurando que Sánchez «se lanzó a la piscina sin flotador y sin agua» y que «ni los suyos le escuchan».
Por otro lado, el primer edil anunció que desde el equipo de gobierno seguirán reiterando su petición para que el San Miguel pueda utilizarse cuanto antes, y sobre el retraso de las obras (de casi 7 meses) dijo esperar que no obedezca a que se quieran inaugurarlo justo antes de las elecciones autonómicas, algo en lo que «la Junta es especialista».
Penalizaciones por demora
Además, añadió que es la Junta quien debe exigir a la empresa que cumpla los plazos y plantear posibles penalizaciones por la demora. Finalmente, afirmó que «el trato que se hizo no fue bueno», en alusión al convenio suscrito en 2008 mediante el cual la administración autonómica se comprometía a realizar las obras de instalación del césped artificial, disposición de pistas de atletismo y construcción del graderío sur. En su opinión, al tratarse de unas instalaciones municipales, la Junta debería haber dado el dinero al Ayuntamiento para que éste acometiera directamente las actuaciones.
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