250 euros de multa a CGT Úbeda por poner dos carteles en una cabina de teléfonos

El sindicato CGT Úbeda mostró su indignación por la multa de 250 euros que le ha puesto el Ayuntamiento tras haber pegado «con cinta adhesiva» y en la cabina telefónica de la calle Rastro, dos carteles tamaño folio de su sección de enseñanza. Los papeles formaban parte de la campaña que desde el sindicato llevan a cabo todos los cursos en el mes de marzo llamando a la matriculación en la escuela pública.

Desde CGT interpretaron que esta sanción va más allá de una mera denuncia que el Consistorio les impone para cuidar del medio ambiente y la limpieza en la ciudad, pues dijeron creer que «tiene que ver más con el contenido del cartel (la defensa de la escuela pública) que con el hecho en sí mismo».

El sindicato recordó que en la ciudad ubetense la escuela pública va perdiendo unidades de forma progresiva frente a la educación concertada y que, a día de hoy, «funcionan ya más unidades concertadas que públicas». En concreto, siete unidades en la pública, tanto en Infantil de tres años como en primero de ESO, frente a ocho unidades en las mismas etapas educativas en la privada- concertada.

Y remarcó que la CGT tiene entre sus reivindicaciones asuntos como la defensa de lo público, el cuidado del medio ambiente o el respeto del patrimonio, «como ha venido demostrando con su actitud y comportamiento durante más de treinta años de existencia en nuestra ciudad». Así, considera «lamentable» que un hecho «tan insignificante como es pegar con cinta adhesiva dos carteles en una cabina telefónica», tenga una sanción de 250 euros.

«No queremos hacer demagogia, pero los criterios que tiene el Ayuntamiento para dar ejemplo e imponer sanciones, debe revisarlos dado el estado de limpieza por el que atraviesan determinadas zonas, accesos y barrios de la ciudad», aseguraron responsables del sindicato. Y dijeron entender que el Consistorio debía haber sancionado igualmente al conjunto de entes, asociaciones e instituciones, como el propio Ayuntamiento o la Diputación Provincial, cuando han pegado carteles en espacios como las cabinas telefónicas.

Por otro lado, recordaron que la CGT es un sindicato que no recibe subvenciones y que se financia única y exclusivamente con las cuotas de su afiliación. Por lo tanto, esta multa de 250 euros «supone la cotización de un mes de cincuenta trabajadoras y trabajadores de esta ciudad, lo que a todas luces es desproporcionado».

CGT ha recurrido esta multa y solicitó el día 5 de junio, con registro de entrada en el Ayuntamiento, una entrevista con la alcaldesa para que conozca estos argumentos. «De momento, no hay noticias de que esa reunión se vaya a producir», aseguraron. Y anunciaron que seguirán defendiendo los valores de lo público y, en concreto, de la educación «laica, gratuita, integradora, coeducativa y compensadora de las desigualdades sociales». Algo que harán «respetando, como siempre y de manera ejemplar, el cuidado y limpieza de una ciudad Patrimonio de la Humanidad».