El Festival de Títeres celebró el centenario de Miguel Pino, padre de Peneque

La programación arrancó además con una cita muy especial, un homenaje a Miguel Pino, el creador de Peneque el Valiente y fundador de la compañía que lleva su nombre, la cual mantienen viva sus hijos Antonio y Miguel, responsables de la dirección de este festival. Y es que este año se conmemora el centenario de su nacimiento. El numeroso público asistente pudo así disfrutar de 'Peneque cien por cien valiente', un recorrido por la trayectoria de su padre. Unos sonajeros de calabaza fueron los protagonistas de esta historia, junto a la querida marioneta de guante que todos los menores adoran y sus amigos. Un espectáculo muy bien hilado, más teatral de lo normal y con tintes del 'clown', que contó además con música en directo gracias a un pianista y un cantante.

De esta forma, decenas de voces infantiles volvieron a unirse en el Teatro Ideal Cinema de Úbeda para gritar «Peneque, Peneque, dónde te metes». Esa es la frase con la que los niños reclaman repetidamente la presencia de uno de sus personajes preferidos que, con más de sesenta años de trayectoria, sigue enloqueciendo a los más pequeños con sus aventuras. Así era al principio, así ha sido siempre y así sigue y seguirá siendo. Porque mantiene la esencia y la inocencia con la que nació y con la que han disfrutado muchas generaciones de personas de todo el país y del extranjero.

Miguel Pino vino al mundo en Villanueva de la Serena (Badajoz) en 1923 y falleció en Málaga en 2010 a los 87 años de edad tras haber dedicado casi toda su vida al mundo del espectáculo. La suya es una historia, una aventura, tan apasionante como la de sus personajes. Trabajó como publicista e incluso como representante de algún artista flamenco, como fue el caso del cantaor Pepe Marchena. Hasta que decidió dar un giro a su trayectoria y enfocarla al público infantil. Fue así como de sus propias manos nació y cobró vida Peneque en el año 1959, dando sus primeros pasos en una radio pirata de Villanueva de la Serena, donde se hacía un programa en el que los niños cantaban y las marionetas cada día eran más protagonistas.

Poco después, con una maleta, un pequeño escenario y un viejo coche comenzó a recorrer toda España, ganándose el cariño de grandes y pequeños, aunque los inicios no fueron un camino de rosas. Pero supo aprovechar sus conocimientos en torno al mundo artístico, la publicidad y los circuitos culturales y de fiestas de aquella época. Uno de sus mayores logros fue llevar los títeres a los teatros, pues hasta entonces su escenario natural era la calle.

Hoy, la compañía que lleva el nombre de Miguel Pino está en manos de sus hijos, Antonio y Miguel, que siguen en la carretera llevando la ilusión donde se les solicita. El primero se encarga de la manipulación y las voces de las marionetas. El segundo interpreta al Señor Pino, el equivalente al 'cara blanca' o el 'empresario' del mundo de los payasos, que aporta la formalidad o la seriedad. Y ambos van acompañados por Isabel Hurtado, esposa de Antonio, que interpreta a la pizpireta e inocente Tina Madrina.

Los tres ven ilusionados cómo muchos padres o abuelos que en su día disfrutaron de Peneque, actualmente acompañan a sus hijos o nietos a las funciones, lo cual genera un ambiente de comunión en familia difícil de explicar si no se vive. Tienen además las responsabilidad de protagonizar el primer contacto que numerosos pequeños mantienen con el teatro, algo que arrastra su importancia, pues ahí empiezan a formarse los futuros espectadores de otras propuestas culturales.

El festival continuó el miércoles con el espectáculo 'La sastrecilla valiente', de la mano de la Compañía Xarop Teatre. Una versión de Carles Benlliure Bou inspirada en la obra original de Wilhelm y Jacob Grimm, que pretendió visibilizar a las mujeres trabajadoras, creadoras y valientes, teniendo su propio espacio en este festival y teniendo así presente la perspectiva de género.

Y el jueves fue 'El elefantito', de la Compañía La Canica, la que deleitó al público familiar. Una historia que versó sobre un pequeño elefante que, lleno de curiosidad, emprende un viaje para averiguar qué come un cocodrilo, entre otras cosas interesantes que descubre en su camino.

'Un trocito de luna' será la propuesta del viernes 29 de diciembre, traída por la Compañía A la Sombrita. Cuenta cómo numerosos animales tenían como deseo dar un mordisco a la luna, y tiene como moraleja enseñar que los sueños no son inalcanzables, siempre que se tenga colaboración, poniendo de manifiesto la generosidad, solidaridad y los sueños compartidos.

Bambino Teatro actuará el sábado 30 de diciembre con la obra 'La niña que riega la albahaca y el príncipe preguntón', un viejo cuento andaluz, adaptado al teatro por Federico García Lorca, que impresionará por su colorido y música a piano en directo.

Y el broche de oro de esta edición se pondrá el 2 de enero con una gran fiesta en la que estarán Peneque el Valiente, la banda joven de la Agrupación Musical Ubetense de Úbeda dirigida por Cristóbal López Gándara y el grupo de payasos Los Salpiñoni. Presentarán Miguel Pino y Tina Madrina y contará con las aventuras de Peneque.

Las entradas, cuyo coste es de 1,5 euros, se pueden adquirir en taquilla, en el propio Teatro Ideal Cinema, una hora antes del inicio de cada función.