Un libro recorre la vida, obra y no pocos milagros culturales de Diego Martínez

Al cumplirse un año del fallecimiento de su presidente, la Asociación Cultural Amigos de la Música desarrolló la primera edición del Memorial Diego Martínez, cita que pretende repetir todos los años por estas fechas para recordar a quien en días pasados recibió la Medalla de Oro de Úbeda por su contribución a la cultura, y quien meses atrás también obtuvo la Medalla de Oro del colectivo, en ambos casos a título póstumo.

El acto, celebrado el jueves en la sala Pintor Elbo del Hospital de Santiago, sirvió para repasar su trayectoria, su vida y no pocos milagros. Y es que incluyó la presentación del libro titulado 'Diego Martínez. El hombre y la música', escrito por el musicólogo, investigador y profesor en la Universidad de Granada, Francisco J. Giménez-Rodríguez.

Este trabajo es un recorrido por la vida profesional de un hombre lleno de música. Se estructura en función de las ciudades y las diferentes responsabilidades desde las que ejerció su labor, de Úbeda a Úbeda, pasando por Jaén y Granada. Y deja de manifiesto la inmensa energía, creatividad e imaginación con las que Diego Martínez desarrolló su pasión, llevando casi al infinito los proyectos que realizó (Miguel Ríos en el Carlos V o Alfredo Kraus en Úbeda) y aún más los que imaginó (la Pastoral de Beethoven y la Fura dels Baus en Sierra Nevada o los Rolling Stones en Jaén).

Al estudio musicológico de su trayectoria como músico y gestor cultural, se unen en las páginas del libro una serie de instantáneas en forma de escritos firmados por personas que compartieron momentos con él, acompañados a su vez de imágenes que reflejan una dimensión personal y ofrecen una visión poliédrica del hombre y la música.

La presentación contó con la intervención de Antonio Fuentes Miranda, actual presidente de Amigos de la Música, quien ocupó la mesa junto al autor y frente a numerosos familiares y amigos del homenajeado. Francisco J. Giménez-Rodríguez habló de Diego Martínez como músico y melómano, de sus inicios, sus influencias y sus enseñanzas a unos alumnos a los que motivaba hablándoles de autores, obras y conciertos.

También habló de Diego Martínez como gestor cultural, asegurando que, a diferencia de otros, a él no le gustaba prometer, sino planificar y hacer realidad esos planes pese a los muchos inconvenientes que solía encontrar. Aludió así a su labor en el Festival de Otoño de Jaén, programando ciclos brillantes; o en el Archivo Manuel de Falla, que logró abrir a todo el mundo; o en el Certamen Internacional de Guitarra Clásica 'Andrés Segovia' de La Herradura, donde incrementó el nivel y la participación; o en el Festival de Música y Danza de Granada, desde el que se propuso dar a Manuel de Falla y su obra la importancia que merecía, buscando que fuera conocido mundialmente como el compositor de Granada. Y lo consiguió, así como otros hitos, entre los que destacó el concierto de Miguel Ríos junto a la Orquesta Ciudad de Granada en el Palacio de Carlos V, recinto que finalmente vibró con el espectáculo pese a tenerlo todo en contra para su organización.

«Cuando Diego se va las cosas se otoñan», aseveró el autor del libro, destacando cómo hubo un antes y un después de que Diego Martínez se sentara a los mandos de los eventos y entidades que dirigió. Así, por ejemplo, tras su salida, el Festival de Otoño perdió brillantez, el Archivo Manuel de Falla volvió a ser el centro elitista que era anteriormente y el Festival de Música bajo de la excelencia a la normalidad.

En el caso de Úbeda, donde regresó en su última época «con más ganas que nunca», queda la esperanza de una semilla sembrada en tierra muy bien abonada, la de quienes trabajaron junto a él desde el principio, entendieron sus sueños y los hicieron propios. Toca pues regarla bien y que florezca, para que en lo cultural y, sobre todo, en lo musical, no haya un otoño, sino una primavera. Seguro que así será.

En este primer memorial no faltó la música. Después de la presentación del libro se pudo disfrutar de un concierto que corrió a cargo del guitarrista José Luis Morillas, en el que se interpretó la obra 'Poema de la Bahía (a Diego Martínez, siempre con nosotros)' del compositor madrileño David del Puerto, encargo del Certamen Internacional de Guitarra Clásica 'Andrés Segovia' de La Herradura (Granada). Una preciosa y compleja pieza, con muchos matices que recuerdan al ubetense, y que será de interpretación obligada para los participantes en el citado concurso.

'Diego Martínez. El hombre y la música' también fue presentado el viernes de la pasada semana en La Herradura (Granada), con motivo del XXXVI Certamen Internacional de Guitarra Clásica 'Andrés Segovia' en el que el ubetense estuvo muy implicado como presidente del jurado. Y además se aprovechó para descubrir el cartel y una placa que dan el nombre de Diego Martínez al auditorio del centro cívico herradureño que acoge el concurso cada año. Asimismo, el libro se presentó en Granada el pasado lunes, en el salón de actos de la Corrala de Santiago. Y el miércoles se repitió el acto en Madrid, en la sala Manuel de Falla de la SGAE, contándose además con la presencia del cantante Miguel Ríos.

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