Alberto Román Vílchez
Miércoles, 11 de mayo 2016, 16:01
Concretamente, un grupo de vecinos se han puesto en contacto con IDEAL para expresar las molestias que han sufrido durante algo más de dos meses por el entoldado de las calles, y también para criticar las formas con las que se ha hecho todo. Y han asegurado que tomarán medidas para que esto no vuelva a ocurrir, toda vez que hay intenciones de repetir la idea el próximo año e incluso de ampliarla con más toldos. De entrada, remitirán un documento al Ayuntamiento planteando sus quejas.
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Según estos ubetenses, las lonas se pusieron en las fachadas de las viviendas sin pedirle permiso a los propietarios de las mismas. Hubo incluso vecinos que estuvieron de vacaciones y a su regreso se encontraron con los toldos colocados. Al respecto consideran que esto no se puede hacer sin la correspondiente autorización expresa de todos y cada uno de los titulares de las casas afectadas, la cual debe plasmarse por escrito. Y si no la dieran, afirman que no podría colgarse elemento alguno de sus fachadas.
Sin vistas
Otro aspecto que critican es que muchos de los toldos se anclaron a una altura inferior a la de los tejados, dejando por encima ventanas y balcones de ciertas viviendas que, directamente, se quedaron sin vistas a la calle. Esto creen que vulnera los derechos de los habitantes de estas casas, y no entienden cómo se permite que ocurra cuando pagan un IBI correspondiente a una zona de lujo de la ciudad, impuesto que incluye esos balcones que se quedan sin visión.
Y como nunca llueve a gusto de todos, también hay casos de pisos que se quedan bajo los toldos, en la zona de sombra y con vistas, pero que sus propietarios reclaman poder tomar el sol en los balcones. Así ocurre, por ejemplo, con alguna persona enferma.
Además, denuncian que hubo toldos que se soltaron de algunos amarres unos quince días antes de su retirada, con lo cual golpeaban las fachadas los días de viento de finales de septiembre e impidieron el descanso de los vecinos.
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Ante el rumor de que los toldos se instalarán el año que viene antes de Semana Santa, este grupo de propietarios se está planteando movilizaciones contra Alciser y contra el Ayuntamiento para intentar evitarlo. Y es que hay quien asegura que tendría problemas también para ver las procesiones.
No obstante, aunque no se monten en primavera y se contemplen sólo para el verano, que es lo más probable, estos vecinos dicen que se van a oponer por todos los medios legales a que en sus fachadas se vuelvan a colgar las lonas que les quitan vistas y luminosidad a sus casas.
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Un malestar que viene de largo
En el caso concreto de los vecinos de la calle Mesones, aseguran que viene de largo el malestar por la actitud de Alciser y el consentimiento que el Ayuntamiento le da a todo lo que hace el colectivo. Según dicen, parece que lo único que importa en esa calle es el comercio, olvidándose las autoridades de que hay vecinos que pagan religiosamente sus impuestos.
Así, junto a los problemas con los toldos, recuerdan que en Navidad se instalan altavoces por los que suenan villancicos a todo volumen durante gran parte del día, o que durante las obras de la calle se estuvo trabajando de noche y no por el día para no molestar a las tiendas, aunque ello impidiera el descanso de los habitantes del lugar.
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