Actividad física para las familias beneficiarias de la Cocina Familiar Comunitaria

Dentro de esta labor paralela a la meramente alimenticia, tuvo lugar un taller de Zumba gracias a la colaboración de la Escuela de Danza y Pilates Rocío, que brindó sus conocimientos y sus instalaciones de la calle Virgen de Guadalupe. La profesora de danza Rocío Martínez Campos colabora por tercer año con este proyecto de la Fundación Don Bosco que desde sus inicios ha priorizado la participación de empresas ubetenses dispuestas a aportar altruistamente sus servicios a la Cocina Familiar Comunitaria. Su aportación da la oportunidad de realizar de manera puntual actividades de ocio, entre otras, a las que las familias beneficiarias no suelen tener acceso, ya sea por desconocimiento o por falta de recursos.

Rocío Martínez Campos comenzó ofreciendo clases de Batuka para menores en las Escuelas de Verano de la fundación y talleres de Pilates en el actual proyecto. Y este año, por las demandas de los beneficiarios, se ha considerado desarrollar un taller de Zumba a través de varias sesiones, entendiendo que el ejercicio físico mejora considerablemente el estado de ánimo de las personas que pasan por situaciones estresantes y aporta satisfacción personal y física.