Instantáneas que reflejan proyectos reales y cercanos de inclusión social

Su objetivo es dar una nueva perspectiva originada desde la capacidad de lucha y de participación de los colectivos que aparecen en las instantáneas (mujeres, niños, mayores, discapacitados, inmigrantes, personas de otras etnias). El medio que se utiliza para ello es la fotografía, que ofrece una mirada directa y abierta de la inclusión social y no la exclusión social, quizá más habitual en este tipo de propuestas. En definitiva, se busca aportar una imagen en positivo y no en negativo, una versión inclusiva y no exclusiva. Y además, gracias a este proyecto, la cultura se ha acercado a la atención social y a colectivos que en otras circunstancias no visitarían una exposición.

La iniciativa es mucho más que una exposición. Primero hubo un concurso para miembros de la AFU al que se presentaron 196 obras de un total de 20 autores, todas ellas sobre 4 proyectos sociales que se desarrollan en la ciudad ubetense. Aparecen así, por ejemplo, beneficiarios del Taller Ocupacional, del proyecto de cocina comunitaria, del grupo de personas con diversidad funcional de la Escuela Municipal de Teatro y de las actividades de la Fundación Proyecto Don Bosco.

Para captar las imágenes, los fotógrafos tuvieron que visitar estos proyectos inclusivos y conocer su funcionamiento y a sus participantes, lo cual tuvo un importante componente de fomento de esta labor que después se ha multiplicado con la exposición al llegar las fotos al gran público. Se seleccionaron un total de 32 instantáneas, 8 por proyecto, que son las que se pueden ver en el Hospital de Santiago. Para ello se contó con la colaboración de los fotógrafos Marcelo Góngora y Aurora Lechuga y del periodista Juanjo Ballesteros, que actuaron como jurado.

Una vez que termine su exhibición en el centro cultural, la muestra será expuesta en el Centro Social Polivalente y en el Taller Ocupacional de la localidad. Quizá también viaje fuera de Úbeda. Y finalmente, una parte quedará de forma permanente decorando el Centro Municipal de Servicios Sociales Comunitarios, eje principal de las intervenciones sociales del sistema público.

Cerrar el círculo

Se cerrará así un círculo, porque la idea de todo este proyecto nació toda vez que la mayoría de las imágenes que se muestran en los centros de atención social a través de cuadros, carteles y pósteres son tristes, duras, planteadas en negativo. Hablan de exclusión pero no de inclusión. Esta observación fue la que llevó a Silvia Sánchez a pensar que sería mucho mejor disponer de imágenes que reflejaran los mismos problemas pero en positivo, desde una perspectiva del trabajo por la inclusión, pues bastante tiene quien va a un centro de servicios sociales con los problemas a los que se enfrenta a diario como para ser bombardeado con estampas tristes. Surgió así Por una imagen real, cuyo resultado es el que se puede ver en el Hospital de Santiago.

Paralelamente se quiere crear un catálogo fotográfico para poder mostrar todos los trabajos realizados por los participantes del concurso. Servirá no sólo para difundir la perspectiva inclusiva, sino para reflejar el importante trabajo que muchas entidades realizan diariamente en sus proyectos, visualizando así la inclusión como medida de respuesta a la actual situación de crisis.