De iglesia derruida a foco de cultura con posibles restos arquitectónicos de Vandelvira
Según una hipótesis de Baltasar Raya, la Capilla del Santo Cristo del Pozo, situada frente a la puerta principal de San Lorenzo, podría ser del arquitecto de la catedral de Jaén o de alguien de su escuela
ANA SOLA | EFE
Viernes, 13 de enero 2017, 10:23
La iglesia de San Lorenzo de Úbeda abría en 2014 tras 80 años cerrada, con la esperanza de superar la ruina, y ahora no solo ... se ha convertido en un foco cultural sino que su estudio ha descubierto que una de sus capillas pudo haber sido diseñada por Andrés de Vandelvira, uno de los grandes arquitectos renacentistas.
Al menos así lo cree Baltasar Raya, que recientemente ha presentado su libro "La arquitectura vandelviriana en la provincia de Jaén", en el que analiza en profundidad la obra de Vandelvira y realiza un estudio gráfico de la misma a través de dibujos.
Baltasar Raya ha explicado que ha dedicado tres años a viajar, tomar fotos, notas y medidas de la prolífica obra de Andrés de Vandelvira (Alcaraz, 1505-Albacete, 1575), entre la que se encuentra la Catedral de Jaén, la iglesia del Salvador de Úbeda o cientos de iglesias, fachadas e incluso puentes.
Fue el propio Baltasar Raya el que se ofreció a hacer un estudio gráfico de la iglesia de San Lorenzo cuando esta abrió sus puertas y dedicó un verano entero a tomar medidas y analizar palmo a palmo el edificio.
De ahí ha surgido un pequeño libro, titulado "Estudio gráfico del conjunto de San Lorenzo", dado a conocer también en la presentación de su libro sobre la obra de Vandelvira.
La Capilla del Santo Cristo del Pozo, situada frente a la puerta principal del templo, tiene una mención especial en este estudio, por ser la más elegante y la que presenta una decoración más lujosa de entre la docena de capillas que albergaban la iglesia.
Se desconoce la fecha exacta de su construcción, aunque, según la hipótesis de Baltasar Raya, basándose en su traza, pudo ser realizada por Vandelvira o por alguien de su escuela.
La elegancia de sus formas, la disposición a distinta altura de los bastones que rellenan las acanaladuras de los fustes de las columnas, y la inclusión de esculturas en los espacios arquitectónicos como cabezas aladas y figuras de la Fe y la Caridad son características atribuibles a Vandelvira, de las que dan idea los dibujos y la representación ortofotográfica de la capilla.
Se sabe por los textos de Ginés de la Jara Torres que "fue propia de la familia Baillo, en ella fundó una capellanía merlenga o laica (en que no intervenía la autoridad eclesiástica) ante Juan de Cotillas, escribano de Úbeda, don Alonso Gómez de Baillo y doña Ana de Higueras, su mujer" y varios descendientes recogieron en su testamento "mandar su entierro en ella".
La iglesia de San Lorenzo, rescatada por los tres hermanos Berlanga, gracias a su Fundación Huerta de San Antonio, no solo ha conseguido abrir de nuevo sus puertas y llenarse de cultura, sino que mes a mes ven la luz algunos de sus misterios, ocultos durante siglos.
Así ha pasado con la aparición de un arco románico o protogótico escondido en un doble muro de la ante sacristía, un cuerpo lateral con ventanas de arcos apuntados decoradas, de alto interés histórico y artístico, o las excavaciones que han sacado a la luz numerosos enterramientos medievales y renacentistas.
Durante décadas, desde que tras su saqueo e incendio en 1936 la iglesia fuera cerrada al culto, personas sin hogar, vándalos, imágenes sagradas y talleres de pintores convivieron con estos restos arquitectónicos.
Ahora su riqueza se da a conocer al mundo a través de su estudio arquitectónico y de las numerosas actividades culturales que desde 2014 la llenan y en la que suelen participar cantantes como el ubetense Joaquín Sabina o escritores como Antonio Muñoz Molina, muy vinculada a ella al ubicarse en el barrio donde nació y correteaba en su niñez
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