La pintura de Damián Martínez Guijarro camina por 'Vereas flamencas'

Retratos de reconocidos artistas del cante, el baile o el toque, manos, gestos, quejidos, conversaciones, banquetes, bodegones, música, arabescos, abstracciones y mucho mas, se puede ver en los alrededor de 25 cuadros que Martínez Guijarro ha colgado en la planta baja del emblemático edificio renacentista, en la que es su primera exposición formal en la ciudad que le vio nacer (antes expuso en algunos locales del sector hostelero).

Así aparecen figuras como Paco de Lucía, Moraíto, Enrique Morente, Camarón o Estrella Morente, artistas a los que el pintor admira. Y destacan algunos detalles característicos y poses, como unas manos haciendo palmas, o unos nudillos golpeando a compás, o unos dedos rasgueando las cuerdas de una guitarra.

Junto a los cuadros en gran formato de consagrados artistas en los que utiliza un fuerte contraste de color, en acuarela realiza retratos pequeños y a carboncillo dibujos de detalles. Añade además símbolos, figuras geométricas, cenefas que siempre tienen un sentido en relación al personaje en cuestión o al flamenco, su historia y orígenes.

Damián Martínez Guijarro forma parte de ese nutrido grupo de nuevos talentos ubetenses que han encontrado en la pintura una forma de expresarse, un proyecto de vida en torno al cual dirigir sus pasos. A sus 26 años, y tras un periodo de formación y perfeccionamiento, ha comenzado a mostrar su obra en público, pues ha reunido una buena colección digna de no quedar amontonada en un estudio.

Ya participó en dos exposiciones colectivas de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, donde cursó sus estudios. Y recientemente mostró parte de su producción en el Ateneo de Málaga. Sus trabajos también han estado presentes en cartelería de espectáculos y sus dibujos han complementado trabajos periodísticos o de investigación.

La temática principal de Martínez Guijarro se desarrolla principalmente entre la figura humana y el retrato, aunque también se desenvuelve con matices de la abstracción, sobre todo en los fondos. Siente predilección por la estética andaluza, y muy especialmente por el mundo del flamenco. Esta serie de obras tuvo su origen en un trabajo de máster y después no ha parado de desarrollarla.

Damián Martínez Guijarro ha encontrado su camino entre el estilo figurativo y el realismo, y es consciente de que aún le queda mucho por aprender, trabajar y demostrar en este difícil mundo del arte. Quiere hacerlo lento pero seguro, asumiendo proyectos poco a poco.

Formación

Damián Martínez Guijarro nació en Úbeda, el 20 de junio de 1990. En la ciudad estudió el bachiller artístico, en la Escuela de Arte Casa de las Torres, y mas tarde se trasladó a Sevilla para cursar la carrera de Bellas Artes, licenciándose en 2013, para después cursar allí el máster 'Arte: Idea y Producción' y el de 'Arte y Educación'. Asegura que su pasión por la pintura le viene de su padre, su «referente», el conocido profesor, historiador e investigador ubetense Juan Ramón Martínez Elvira, quien también ha tenido sus experiencias con los lápices y los pinceles. «Pinta muy bien. Además, siendo yo pequeño, le recuerdo escribiendo, y cuando yo me ponía a su lado, siempre me daba un papel y algo para pintar y así pasábamos el rato», rememoraba recientemente para IDEAL.