El ubetense Julián Quesada, mejor vendedor de la ONCE en las provincias de Almería, Granada y Jaén

Quesada, junto a los otros 21 vendedores seleccionados de todos los puntos de España, recibió su galardón en el transcurso de una cena de gala celebrada el pasado fin de semana en Madrid, donde todos estuvieron acompañados por los máximos responsables de la organización.

El ubetense, que comenzó como vendedor en la ONCE en 2008, considera que para ser un buen vendedor hace falta ser simpático y agradable con los clientes. «Hay que comprender a la gente sin obligar a que compre», resume. Y reconoce que comparte «muchísimas cosas» con sus clientes, quienes le cuentan sus problemas aprovechando el tiempo que comparten durante la venta.

«Se arma un vínculo importante con la persona, aquí nos conocemos todos al ser un pueblo más pequeño, y nos ayudamos unos a otros», dice. Una buena exposición del producto también cuenta para que la venta resulte más atractiva, añade. «Yo creo que me han elegido vendedor del año por hacerlo bien», dice orgulloso.

Los premiados disfrutaron de la gala y de todo un fin de semana de convivencia y compañerismo, en el que hubo tiempo para una visita guiada por Madrid titulada 'Del vanguardismo arquitectónico del siglo XXI al centro histórico de la ciudad'. Asistieron igualmente a un espectáculo cultural, así como a almuerzos y cenas de convivencia, disponiendo además de tiempo libre para su propio esparcimiento.

Como es tradición, el lema elegido para la gala de los mejores vendedores de la ONCE del año 2020, en su décimo cuarta edición, fue el de 'Buena gente ONCE', y transcurrió bajo los valores del talento, perseverancia, solidaridad, ilusión, respeto, igualdad, unión, cercanía, simpatía, ingenio y compromiso.

Estos son, precisamente, algunos de los valores que la ONCE tiene en cuenta a la hora de seleccionar a aquellos vendedores que han destacado a lo largo del año, además del propio desempeño de su trabajo, su actitud en el puesto, su grado de implicación en la vida institucional de la organización y su compromiso con la labor social.

La gran gala 'Buena gente ONCE' quiso recrear, de forma presencial, una sesión telemática de una de esas plataformas tecnológicas que nos han permitido estar un poco más cerca de los nuestros durante la pandemia. Con esa premisa, toda la escenografía y estructura del acto fueron customizadas simulando un entorno informático: el escenario recreaba la pantalla de un ordenador portátil, el suelo un teclado con una línea braille incorporada, la mesa del presentador y autoridades un ratón, etcétera.

Bajo la conducción del popular locutor de radio Juanma Ortega, que actuó a modo de anfitrión/hospedador de la sesión, los vendedores fueron erigiéndose como auténticos protagonistas de la gala, amenizada con diversas actuaciones del grupo de teatro Yllana en estrecha colaboración con La Luciérnaga, el prestigioso grupo de teatro de la ONCE.

Con esta ceremonia anual, la ONCE hace un reconocimiento especial a los trabajadores que han demostrado su esfuerzo durante todo el año y, por extensión, a los cerca de 20.000 vendedores de la organización que conforman en la actualidad el principal canal de ventas de sus productos de juego.

Según manifestó durante el acto Miguel Carballeda, presidente del Grupo Social ONCE, «es una suerte volver a encontrarnos aquí, en nuestra casa, y poder compartirlo con los mejores vendedores y vendedoras del año. Ellos son nuestro punto de partida, la conexión con esa sociedad civil que cada día se acerca a estos hombres y mujeres, centinelas de la ilusión, para hacer posible que el Grupo Social ONCE siga siendo el mayor empleador del mundo de personas con discapacidad».