La Virgen de Guadalupe será trasladada de Santa María a San Pablo el día de su festividad

Será un recorrido muy corto y rápido, en traslado y no en procesión, participarán menos horquilleros para garantizar la distancia entre ellos y no habrá acompañamiento musical, pero la patrona de Úbeda volverá a desfilar por el casco histórico tras un año sin poder hacerlo debido a la pandemia.

Tras la reunión de sus dirigentes una vez conocido el decreto del Obispado, la Real Archicofradía de Nuestra Señora de Guadalupe decidió tramitar los permisos correspondientes ante la Diócesis, obteniendo la autorización para este traslado. También hizo lo propio con las autoridades civiles competentes y concretó el dispositivo necesario con el Ayuntamiento.

De esta forma, el próximo 8 de septiembre, día grande para los guadalupanos, se mantendrán los actos programados con la novedad de que culminarán con este traslado. A las once y media de la mañana tendrá lugar la fiesta principal dedicada a la patrona, presidida por el arcipreste de Úbeda, rector de Santa María, capellán y consiliario de la Real Archicofradía, Antonio Vela Aranda, concelebrada por los sacerdotes y clero en general y amenizada por el grupo Camerata Beheme.

Respecto a la tarde, a las ocho, se desarrollará un acto de acción de gracias con la imagen de la patrona ante Santa María, que incluirá un recuerdo para responsables públicos y fuerzas de seguridad. Participarán la Agrupación Musical Ubetense y la Banda de Cornetas y Tambores Virgen de Guadalupe.

E inmediatamente después la Chiquitilla del Gavellar será trasladada hasta la cercana iglesia de San Pablo recorriendo la calle Juan Ruiz González y la plaza Primero de Mayo. Será como llevarla sobre andas, pues la estructura no llevará tantos elementos como era habitual. Y la portarán 22 horquilleros, de los 40 que solían participar, guardando las distancias entre ellos. Pero no habrá acompañamiento musical.